Anunciaron la reapertura de Fanazul con más de cien trabajadores

Cinco años después de su cierre, la planta de Fabricaciones Militares ubicada en Azul reabrirá sus puertas desde mediados de abril.


Fanazul, la célebre planta de Fabricaciones Militares ubicada en el distrito de Azul, anunció que concretará su reapertura formal a mediados de abril para producir el material explosivo master mix (utilizado para la fabricación de dinamitas) con más de cien trabajadores en su grilla productiva. La noticia fue dada en los últimos días por la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) bonaerense, luego de la recorrida de su secretario general, Oscar de Isasi, por la fábrica.

Ubicada a 35km de la ciudad de Azul, su lejanía de cualquier centro urbano, resulta un aspecto muy favorable respecto de las pautas de seguridad física, ocupacional y medioambiental. Además, es una posición estratégica respecto de los puntos de distribución como así también de los centros de abastecimiento más cercanos. Durante su historia, la Fábrica Militar Azul dedicó su producción a la elaboración de TNT, DNT y otros derivados de la nitración del tolueno, explosivos gelatinosos, agentes de voladura, explosivos pulverulentos, emulsiones, boosters y carga de proyectiles para las Fuerzas Armadas.

El 28 de diciembre de 2017, las autoridades de la ex Dirección General de Fabricaciones Militares comunicaron a los 220 trabajadores el completo cese de actividades y el cierre definitivo de la planta. En diciembre de 2020, el Ministerio de Defensa revirtió esta medida y formalizó la transferencia del predio nuevamente a Fabricaciones Militares SE para trabajar en su reapertura. “La fábrica tiene fecha de apertura para mediados de abril, luego de que el Gobierno nacional invirtiera alrededor de $US 5 millones de dólares en la puesta en valor de la misma”, informó ATE.

“Se va a producir master mix, que es un producto que ya se venía haciendo cuando Fanazul fue cerrada por el neoliberalismo”, indicó Vanina Zurita, la dirigente de ATE provincial azuleña. Además, señaló que ya “hay más de cien trabajadores” para las actividades y que “ochenta de estos fueron reincorporados”. “Faltan algunos que, a medida que empiece la producción a acrecentarse, van a ir siendo reincorporados”. Tal como viene anunciándose, la planta también podría dedicarse a la destrucción de chalecos antibalas. “Ya están las tratativas avanzadas”, señalaron fuentes sindicales.

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