«No podemos seguir permitiendo que nuestras vidas estén en manos de este sistema patriarcal», así lo mencionaron desde Movimiento Evita en la concentración que se realizó en la sede de Fiscalía que se encuentra ubicada en Moreno y Rufino Fal. La convocatoria se dio a nivel Nacional y Olavarría también marchó por Úrsula.

Desde la organización emitieron un comunicado en el cual mencionaron «los grandes avances que hemos tenido en materia de políticas públicas como consecuencia de un Estado Presente y que ha demostrado escuchar las demandas de los feminismos, la violencia hacia las mujeres y disidencias se ha recrudecido. El dolor se nos hace carne todos los días la impotencia y la bronca se hace presente en cada una de nosotras». 

«El femicidio de Úrsula hace pocos días atrás y los que sucedieron contabilizando hasta hoy 46 femicidios y travesticidios en lo que va del 2021 nos obliga a pensar nuevamente que cosas nos están faltando y que limitaciones existen en las herramientas con las que ya contamos.  Como movimiento social, político y feminista que se identifica con el Gobierno Nacional del Frente de Todos, con trabajo territorial y acompañamiento en situaciones de violencia de género tenemos la responsabilidad política y moral de hacer visible la necesidad y demandas ante nuestros referentes políticos, quienes actualmente se encuentran en la importante tarea de gobernar en los diferentes niveles del Estado, en función de las reivindicaciones y necesidades de quienes formamos parte de la comunidad». 

Por otro lado mencionaron «de qué sirve tener, crear o impulsar instituciones para abordar violencias por cuestiones de género si las personas que las conducen no están formadas para eso, qué confianza y acompañamiento podemos encontrar en esas instituciones si cuando nos acercamos volvemos a hacer violentadas, estigmatizadas y revictimizadas, situación que se vuelve aún más grave cuando esas mujeres pertenecemos a los sectores más vulnerables de la sociedad o cuando se trata de las disidencias que integran la comunidad Lgtbyq+ que ya cargamos con la falta de acceso a los derechos elementales como es la educación, la salud, una vivienda digna».

Por otra parte mencionan que «las estadísticas demuestran que aproximadamente el 60% de las mujeres no realizan las denuncias correspondientes por estas limitaciones e irregularidades que mencionamos. Muchas de las víctimas de femicidio había realizado denuncias previas sin ser escuchadas, igual que Úrsula asesinada por su ex pareja un efectivo de la policía bonaerense esta situación nos obliga a cuestionar el brazo represivo del estado y sus prácticas materializadas en la policía bonaerense  que constituyen junto con la justicia el principal obstáculo». 

«No podemos seguir permitiendo que nuestras vidas estén en manos de este sistema patriarcal,  y machista que una y mil veces nos sometan, estamos hartas necesitamos gritar y ser oídas de una vez por todas. Es urgente que escuchen nuestro pedido de una reforma judicial feminista que permita un abordaje integral de los derechos, lo que significa una real articulación entre todos.» 

Además piden la «creación de nuevas partidas con nuevos destinos, es una política que debe tomarse de manera inmediata la violencia de género no se resuelve sólo en el discurso, el mismo debe materializarse en herramientas económicas realmente efectivas y en soluciones de empleo y viviendas que nos den autonomía y una salida de los círculos violentos estas herramientas económicas deben estar alejadas de los procesos de burocratización y reglamentación que rigen para todos los demás procedimientos de los organismos estatales». 

«Las redes feministas hemos tejido y venimos sosteniendo entre compañeras y organizaciones muchas veces son más efectivas que los mecanismos del propio estado , y es por esto que demandamos y sentimos la necesidad de ser parte activa de la creación de políticas públicas, queremos que se nos convoquen  para saber qué es lo que pasa». 

Para finalizar mencionaron «Somos nosotras quienes día a día habitamos los territorios y vivimos la  ausencia del Estado, que en vez de protegernos no hacen más que acrecentar nuestro dolor».