Lo señaló el neumonólogo José Manuel Viudes. Teme que en 14 días se vean las consecuencias del desborde que hoy se vio en los bancos argentinos.

El neumonólogo José Manuel Viudes, gerontólogo del Hospital Italiano y coordinador de Cuidados Domiciliarios de Swiss Medical Group, teme que lo ocurrido este viernes con el desborde de personas concurriendo a bancos podría tener sus consecuencias en 14 días, en medio de la lucha contra la pandemia por el coronavirus.

«Nosotros llamamos a esto una bomba biológica», indicó. Luego lo explicó con ejemplos a nivel mundial.

«Cuando queremos ver qué pasó en las ciudades donde hubo un epicentro exagerado respecto a la media, por ejemplo Bérgamo, encontramos que 14 días antes sucedió el partido con 60 mil espectadores de Atalanta y Valencia, lo mismo con Madrid y lo mismo en Israel. Hace 7 días yo tuve una entrevista por lo que pasó en La Matanza y dije que iba a ocurrir algo parecido», señaló.

«Catorce días después Bérgamo se convirtió en lo que fue», sentenció.

«Hace unos días me consultaban sobre lo que pasó en La Matanza y yo dije que podría convertirse en ese partido de fútbol que fue trascendental en la birología mundial».

«Estamos haciendo todo al revés, el geronte es el que tenemos que cuidar. Era el grupo que no debía salir a la calle».

«Hay dos grupos de periodistas y médicos, unos que tratan de ser optimistas, bobalicones, que no va a llegar a ningún lado porque tenemos que ser sinceros y decirles: ‘esta es la pandemia más grande que hemos conocido y hay un millón de infectados’. Ya vemos lo que pasa en Ecuador en un país subdesarrollado. Estamos jugando con fuego».

Dijo que en 14 días se sabrá lo que pudo haber pasado hoy «y lo podemos pagar muy caro».

Viudes indicó que si se utiliza la palabra «guerra», siempre hay que tener en cuenta que debe haber «capitanes, tenientes» que breguen por el bien común.

«¿Cómo puede ser que los bancarios no se den cuenta que todos tenemos que poner lo máximo por un bien común? Los policías están con guantes y eso también está mal porque es una falsa protección», señaló.

«El guante adhiere un montón de virus, y recién acabo de ver un policía que habrá tocado a cientos de personas con esos guantes y acaba de sacar un barbijo y se lo dio a una abuela», dijo sobre una situación vista por TV en Buenos Aires.  «Realmente estamos haciendo hoy todo mal», recalcó

Foto: Archivo